Análisis Kingdom Hearts Melody Of Memory :: Celebración al ritmo de la música

Kingdom Hearts Melody Of Memory :: Celebración al ritmo de la música

Casi dos años después del esperadísimo Kingdom Hearts III, la saga creada y dirigida por Tetsuya Nomura vuelve a las consolas. Melody Of Memory aterrizó el pasado día 13 para dejar atrás, por fin, todo lo ocurrido con Xehanort y enfocar la próxima etapa de Sora, Riku, Kairi y compañía con un último viaje a través de la música que nos acompañó desde el 2002 en las entregas de esta franquicia de Square Enix.

Desarrollado por el estudo indieszero, creadores de los Theatrythm Final Fantasy, Melody Of Memory iba a seguir esta fórmula, pero Nomura decidió que el juego de ritmo que celebraría las composiciones de Yoko Shimomura tenía que acercarse un poco a lo que Kingdom Hearts es como saga. Así, nació este peculiar título que consiste, básicamente, en recorrer (casi) todos los mundos que visitamos desde la primera aventura de Sora y derrotar todo tipo de enemigos al ritmo de la música. Como siempre en los juegos dirigidos por Tetsuya Nomura, por muy secundario que sea, encontraremos algo de historia. En este caso, Kairi explora sus recuerdos en busca de alguna pista en su corazón que la lleve hasta el desaparecido Sora.

Las “inmersiones nemónicas” nos llevarán a través de bonitos montajes de imágenes de la saga

En cuanto a la propia experiencia del videojuego, la presentación visual simple, con un gran pentagrama en el que los 3 personajes van derrotando a los enemigos que aparecen, ayuda mucho a superar la primera barrera, que es la aparente complejidad de los juegos de ritmo. A esto también ayuda el selector de dificultades (principiante, normal y experto) y la calificación de 1 a 15 (siendo 15 el desafío máximo) que el título adjudica a cada canción para avisar al jugador de lo que le espera en cada una de ellas. De algo no hay duda, y es que Melody Of Memory no discrimina a nadie y trata de atraer incluso a quien no es muy fan de los juegos de ritmo, pues los temas de Shimomura –y la nostalgia que los acompaña, todo sea dicho– bien valen un intento a este juego tan diferente dentro de la saga. El modo principal es la “Gira Mundial”, donde viajaremos con nuestra nave gumi a través de los icónicos mundos de la saga. Allí nos esperan dos canciones, por lo general: la del mundo en si y la de batalla. En cada una habrá tres “misiones” que cumplir que no suelen ser muy complejas, salvo las que requieren una cierta cantidad de puntos o combos en la dificultad más alta, y estas misiones serán las que nos permitirán progresar, pues a lo largo del camino habrá puertas que nos pedirán un cierto número de ellas completadas para poder seguir. Por fortuna, apenas son necesarias algo más de la mitad para llegar al mundo final y a medida que vayamos jugando todos los mundos, cumpliremos los requisitos sin problemas. 

Una de las cosas más loables de este título es la cantidad de contenido que Square Enix e indieszero fueron capaces de meter en un juego tan ligerito e fácilmente terminable en ocho o diez horas. Unas 150 canciones están presentes en este Melody Of Memory y entre ellas hay incluso clásicos de Disney como Circle Of Life de Elton John famosa por abrir el film El Rey León o A Whole New World (Un Mundo Ideal de Aladdín). Una vez las desbloqueemos en la Gira Mundial, podremos jugarlas libremente en la Selección de Temas, donde además también nos esperan distintas formas de jugar como el “modo profesional”, que ofrece una dificultad extra al añadir más botones a la formula de X, L1, R1 y Triángulo del gameplay convencional. En el Museo hay cientos de coleccionables en forma de renders, escenas y dibujos originales de todos los juegos de la saga que iremos desbloqueando a medida que juguemos y que añaden ese incentivo para seguir una vez terminamos la historia. Además, contamos con un modo cooperativo y otro versus en el que podemos enfrontarnos con la máquina y con otros jugadores en línea. 

Tenemos hasta 150 canciones diferentes para desbloquear y jugar libremente en la Selección de Temas

A la hora de enfrentarse a este juego, lo primero que llama la atención es lo satisfactorio que resulta –aquí reluce un poco la nostalgia– pegarle a los sincorazones al ritmo de las icónicas canciones de Yoko Shimomura. Detalles como el diseño sonoro, que aporta mucho más impacto a nuestras acciones con los sonidos de las diferentes armas batiendo en los enemigos, contribuyen a esta sensación. También es cierto que no todas las piezas escogidas por Square Enix son muy adecuadas para este tipo de experiencia, aunque los temas de batalla destacan en especial. El mapeado de las canciones, con los enemigos apareciendo a veces incluso de sorpresa, es muy original y el hecho de animarlos para ayudarnos a timear nuestras respuestas, le da mucha vida al título. Se agradece también la inclusión de objetos como pociones, duplicadores de experiencia o la invocación de Mickey Mouse que nos ayudan, tanto a superar los niveles como a alcanzar mejores puntuaciones. La orfebrería de los moguris también está presente, permitiéndonos desbloquear algunas canciones con los materiais que nos dan al completar niveles y conseguir los coleccionables más fácilmente a través del crafteo.

Según la dificultad, el juego nos pedirá que atinemos más notas o menos colocando enemigos en el pentagrama

Sin embargo, no debemos olvidar que estamos ante una entrega hecha en su gran mayoría con assets reciclados de los remasters de los juegos originales para PS3 y PS4 que salió a la venta al precio completo de salida (60 euros). De hecho, el contenido del juego más reciente, Kingdom Hearts III, –desarrollado en otro motor gráfico– es muy limitado y consta únicamente de vídeos pre-renderizados –lo que el juego llama “inmersiones nemónicas”–, por lo que no forman parte de los niveles convencionales en los que machacamos enemigos al ritmo da música. Una pena, pues la banda sonora de este último título es una de las mejores de toda la saga. 

En definitiva, Kingdom Hearts: Melody Of Memory acierta a la hora de ofrecer una experiencia completamente diferente a todo a lo que Nomura y compañía nos tenía acostumados. Se trata de un buen juego de ritmo, original y mucho más accesible que las entregas estándar de este xénero, pero también se puede sentir algo repetitivo y non todas as canciones escogidas son divertidas de jugar. Aún así, funciona, tanto como catalizador de la nueva fase en la que entra la saga de Square Enix como de celebración de todas las entregas anteriores. Una celebración algo cara, eso sí.

7.0

Lo mejor

  • Muy satisfactorio
  • Banda sonora excelente
  • Muy accesible
  • Mucho contenido

Lo peor

  • No vale el precio completo de salida
  • Algunas canciones no se adaptan bien a este formato
  • Puede hacerse repetitivo
Sergio Fernández

Obsesionado co das consoliñas dende que me regalaron a PS2. Moi de Kingdom Hearts e de David Cage. Cando non estou cos videoxogos, podes atoparme escoitando música ou vendo series.