¿Dónde andas Sir Daniel? Veinte años de Medievil

Hace dos décadas, Sony andaba en la búsqueda de un nuevo héroe para su PlayStation. Así como Nintendo parecía tener símbolos a porrón (Mario, Link, Fox McCloud), la consola gris aun no había finalizado el año en el que todo cambiaría a su favor, y necesitaba de una nueva franquicia, de un nuevo personaje que tuviera algo que decir, algo que contar, algo propio.

Recordemos que aquel 1998 fue glorioso: Resident Evil 2, Metal Gear Solid, Spyro, Crash Bandicoot 3, Tenchu, Parasite Eve y… Medievil. Este último título llegó al comprado un 9 de octubre de la mano de la propia Sony, tanto en su desarrollo como en su distribución. Su protagonista era un esqueleto andante de aspecto poco favorecido, tuerto y sin mandíbula inferior, pero de nombre aristocrático, Sir Daniel Fortesque. Hoy en día, sigue siendo uno de los personajes más queridos por los usuarios de aquella época. ¿Por qué?

Medievil se convirtió rápidamente en un éxito de crítica y público. Un vende consolas en sí mismo. Era exclusivo de Sony, por supuesto, y contaba con un humor negro contado con gran ingenio, además de un motor gráfico más que cuidado para la época. La propia historia de su protagonista rompía cualquier estereotipo. Sir Daniel era muchas cosas, pero no un grano luchador. Con todo, su imaginación y verborrea hicieron que el rey Peregrino de Gallowmere lo eligiera para comandar sus ejércitos. Era un buen trabajo, habida cuenta el maravilloso momento de paz que atravesaba el país. Para desgracia de Fortesque, Zarok, el antiguo mago de la corte, decide declararle la guerra con un ejército de muertos vivientes.

Allá fue nuestro protagonista. Al campo de batalla. Dispuesto a luchar, o por lo menos aparentarlo. La primera flecha de la cita bélica le acertó en un ojo. Muerto nada más comenzar. No era el mejor relato posible, pero era lo que había. ¿O no? Zarok es derrotado por las fuerzas locales, que consiguen un victoria más que gloriosa. Ahora bien, el rey Peregrino no podía permitirse el lujo de admitir que Sir Daniel había sido un auténtico fraude como comandante, por lo que permite que su papel de impostor continúe y forja a su alrededor una leyenda que relatase como había sido él quien había llegado hasta el final de la batalla, y que allí preció, luchando por los habitantes del reino. Sus restos fueron tratados con honores y puestos bajo un mausoleo colosal, digno de un héroe. Hasta que regresó a la vida.

Esa era la premisa inicial de Medievil. Un Sir Daniel que volvía para salvar a su país de una nueva invasión de Zarok, irónicamente siendo este último el culpable de su resurrección no prevista. El título de Sony lo tenía todo: un apartado técnico sobresaliente, una jugabilidad exquisita y un protagonista que merecía ser recordado. En total, contaba con 22 niveles diferentes, todos con su propia ambientación y singularidades. No era excesivamente largo, pero era realmente rejugable. Una experiencia divertida y amable, con muchos enemigos diferentes y sin tiempo para aburrir. Llenar el cáliz de almas al cien por cien era un reto con el que obteníamos muy buenas recompensas y que incitaba al jugador a los enfrentamientos con los monstruos.

El juego de PlayStation mezclaba acción con plataformas y, pese a tratarse de un juego lineal en todos los sentidos, también contaba con la existencia de zonas secretas. Había diferentes armas y Sir Daniel funcionaba como un protagonista perfecto, a caballo entre el humor y la lástima, entre lo presente y el pasado, un héroe con mucho que demostrar.

Medievil fue un bombazo. Triunfó como pocos otros en un año en el que la competencia, tanto interna como externa era brutal. Dos años después llegó una segunda parte que heredaba sus mejores mecánicas y apostaba por otras nuevas, como poder separar la cabeza del cuerpo de Sir Daniel y que esta última pudiera moverse sobre unas manos verdes inspiradas claramente en Cosa, de la Familia Adams.

Medievil 2 avanzaba quinientos años en el futuro y el medievo daba paso a una época más moderna, con cierto aire steampunk, en la que Lord Palethorn volvía a lanzar el hechizo de Zarok y lograba revivir a todos los muertos de Londres, entre ellos a nuestro cadavérico amigo, claro. De ser una vieja pieza de museo pasa a tener que ser el salvador del mundo de nuevo. Lo consiguió como no, pero nunca más fue levantado de su tumba (su presencia en PSP fue anecdótica, igual que su participación en el Play Station All- Stars Battle Royale).

¿Y el remake para cuándo?

Si los remakes de los videojuegos fuesen una especie de tele realidad, Medievil sería el eterno nominado. Lo cierto es que durante los últimos años no son pocos los rumores que han circulado alrededor de su regreso con ese formato pero ninguna compañía es capaz de confirmar la existencia de un proyecto serio sobre el tema.

La recuperación de las trilogías de Crash Bandicoot ySpyro, y su éxito (en el caso de Spyro, más que previsible) volvió a poner sobre la mesa el sueño de que Sir Daniel Fortesque aparezca nuevo con un lavado visual que permita a las nuevas generaciones jugarlo nuevamente. Desde Sony, el mutismo es total, y la mayoría de los fans de la saga tienen que conformarse con vídeos hechos por otros forofos anónimos, que estarían encantados de un anuncio que implique a Medievil.

Puede que por otra parte las cosas estén bien así. Bien está lo que bien acaba. ¿Responderían tal como pensamos al paso del tiempo sus sistemas de jugabilidad? ¿Cuánto habría que modificar para que hoy se sintiese fresco? ¿Y si Sir Daniel está bien como está y no desea salvar el mundo de nuevo?